Gracias a las humanidades contamos con marcos críticos, reflexivos, complejos y profundos sobre la realidad vivida. Es lógico concluir, también, que debe haber un esfuerzo de las ciencias biomédicas para “dejarse estudiar”.
Por Vladimir Bustinza. 10 abril, 2023. Publicado en El Peruano, el 8 de abril de 2023.
El 7 de abril de 1948 se creó la Organización Mundial de la Salud (OMS) por lo que en esta magna fecha se instauró el “Día Mundial de la Salud”. Dicha fecha nos remite a un escenario posterior a la guerra mundial en el que, la idea de promover la salud y hacer que en todos los países y regiones del mundo se alcance un alto estándar de salud y bienestar se constituyó en uno de los retos de aquellos años difíciles y de incertidumbre.
Setenta y cinco años después, la idea sigue siendo buena y los desafíos y cambios se han ido sucediendo en el mundo de modo que los escenarios sanitarios han ido cambiando constantemente.
También en la formación de los futuros médicos los cambios necesarios y oportunos se han ido generando; además de la indispensable formación científica, somos testigos de que la formación médica continua, las explicaciones relacionadas con los principios de la bioética, la relación médico paciente en la cual se ha visto involucrada la mediación tecnológica y acaso burocrática son temas ineludibles. Sin embargo, solo quiero concentrarme en un tema no menos importante: la formación en Humanidades Médicas. Sí, Humanidades Médicas que no tienen otro fin que “humanizar la medicina” y acercarse al paciente y a su entorno de un modo nuevo.
Gregorio Marañón (1887 – 1960), médico, historiador y pensador español, decía equivocadamente que las Humanidades Médicas eran un descanso o pasatiempo para el ajetreado médico contemporáneo, cuando en realidad son aspectos que ayudan a completar la formación y sensibilidad médicas. Pongamos un ejemplo, el dar malas noticias requiere algo más allá de la mera información; se necesitan habilidades comunicacionales que permitan entender y ser empáticos con el complejo mundo del paciente y su entorno y con su peculiar forma de ver el mundo médico.
Gracias a las Humanidades Médicas todos aquellos aspectos del proceso salud-enfermedad y el ejercicio de la profesión médica que parecen ocultos, según el enfoque exclusivamente biomédico, aparecen en todo su esplendor y contribuyen a desarrollar constantemente una actividad médica de calidad.
Tecnicismo y humanismo en la formación médica no son elementos antagónicos en la educación de nuestros alumnos, sino que son elementos que se fusionan para lograr el fin que describió Honorio Delgado (1892 – 1969), destacado médico psiquiatra peruano, en el primer Congreso Nacional Argentino de Filosofía, llevado a cabo en Mendoza en 1949: “(…) La persona no es una realidad hecha sino un proceso en marcha con infinitas posibilidades. Ciertamente, la ciencia de los fenómenos conclusos, de los hechos definitivos, es la que permite llegar a los resultados más precisos. Empero, por la circunstancia de no consistir en semejante clase de realidad estática, la persona no deja de ser tema del conocimiento de diversas disciplinas”.
De ese modo, las Humanidades Médicas se configuran como un amplio panorama académico que vincula la Salud y la Medicina con las humanidades (Filosofía, Ética, Historia y Religión), las artes (Literatura, Música, Teatro, Artes visuales) y las ciencias sociales (Sociología, Antropología, Psicología, Política, Economía, Derecho, entre otros), las cuales toman a la Medicina y Salud pública como objeto de estudio, dentro de un marco delimitado.
Gracias a las humanidades contamos con marcos críticos, reflexivos, complejos y profundos sobre la realidad vivida. Es lógico concluir, también, que debe haber un esfuerzo de las ciencias biomédicas para “dejarse estudiar”; es decir, permitir ser analizadas desde las perspectivas de las Humanidades, las Artes y las Ciencias sociales.
Cobrará importancia, por ello, la educación continua del personal de salud hasta la humanización de los servicios; el acompañamiento a los pacientes, su uso como terapias o como mecanismo para mejorar las condiciones laborales. Las Artes y las Humanidades han tenido un papel importante en el contexto hospitalario y en todo lo que representan actividades extramurales en los campos de la prevención y la promoción de la salud y la atención primaria, base primordial de todo sistema de salud, la cual urge fortalecer.
El lema propuesto por la OMS para celebrar este año su 75º aniversario es “75 años mejorando la Salud Pública”. Que este propósito nos lleve hoy, Día Mundial de la Salud, a todos los que ejercemos la Medicina y la Docencia a promover la enseñanza y el aprendizaje de las Humanidades, para el bien de nuestros futuros médicos y de la sociedad que esperan mucho de nosotros.
Este es un artículo de opinión. Las ideas y opiniones expresadas aquí son de responsabilidad del autor.
